La robótica generará en 2020 un negocio de hasta 54.000 millones de dólares y España no se lo quiere perder. Abre sus puertas el primer centro de excelencia en ‘robotics’ del país



Estamos ante una industria milmillonaria, la robótica. Es el nuevo objeto de deseo de todas las grandes compañías, y quien no quiera entrar en ella corre el riesgo de quedarse fuera de un sector que va a cambiar los nichos de negocio de todas las empresas del mundo.

Tras dos años prestando asesoramiento a empresas dentro del ámbito de la robótica, Deloitte ha puesto en marcha su nuevo centro de excelencia de ‘robotics’, la tecnología que implementa un robot en la organización empresarial. Este centro es el único dedicado exclusivamente a este ámbito ubicado en nuestro país y el quinto que Deloitte pone en marcha a nivel internacional (Estados Unidos, México, República Checa, India).

 

100 profesionales y 4.000 especialistas

Situado en Madrid, el centro agrupa a más de 100 profesionales que están integrados, a su vez, en el equipo de más de 4.000 especialistas con los que la firma cuenta a nivel mundial. Su objetivo es acelerar los procesos y la innovación robótica incorporando metodologías de trabajo y gestión del conocimiento específicas.

La apertura de este centro supone reforzar los servicios de consultoría de transformación digital y tecnológica de Deloitte, avanzando en la especialización para todas aquellas compañías que quieran avanzar en el campo de la robótica y la automatización.

«El auge de esta tecnología está siendo exponencial», asegura Luis González Gugel, socio responsable de Robotics de Deloitte, ya que «la adopción de robots para la automatización de procesos será prácticamente universal en tan solo cinco años y el volumen de inversión del mercado en compañías de desarrollo de ‘software’ de ‘robotics’ es alto y creciente«.

Además, «si a ello le sumamos la paralela y progresiva incorporación de los elementos cognitivos a esta tecnología, el crecimiento exponencial del número de datos digitalizados que amplían su capacidad de alcance y el desarrollo de los conceptos de ‘big data’ y ‘analitycs’, se hace imposible imaginar los nuevos límites que se pueden alcanzar con esta tecnología».

 

Un auge de cifras milmillonarias

Con la apertura de este centro de excelencia, la previsión de Deloitte pasa por duplicar el negocio del sector de la robótica en un año, posicionándose como uno de los principales centros de este tipo a nivel europeo.

Según los estudios que se vienen manejando en los últimos años, el negocio de la automatización de procesos por robots está experimentando un auge exponencial que cada año nos sumerge en cifras milmillonarias. Según un informe de HfS Research, en 2021 el volumen de negocio de este sector será de 12.700 millones de dólares. Morgan Stanley, por su parte, sube la apuesta en otro estudio y eleva el potencial de esta industria hasta los 54.000 millones.

Además, según otro informe de Deloitte, el 53% de las empresas ya está inmerso en la implantación de la automatización de procesos por parte de robots (Robotic Process Automation, RPA, por sus siglas en inglés) y el 19% lo hará en los próximos dos años. Si la tendencia se mantiene al mismo ritmo, RPA habrá alcanzado una adopción prácticamente universal en los próximos cinco años.

A Luis González Gugel no le caben dudas sobre el potencial de esta industria y el papel que puede jugar Deloitte: «Los diferentes perfiles de nuestros expertos nos permiten ayudar a las empresas en todas las fases: desde la estrategia, pasando por el diseño y la implementación, hasta el control de la operativa de los robots». A día de hoy, Deloitte tiene acuerdos con los principales proveedores de ‘software’ de RPA del mundo, como Uipath, Workfusion, Blueprism, Automation Anywhere, Jidoka o Nice, entre otros.

 

«La robótica transformará los negocios»

Para González Gugel, «la robótica está siendo un elemento transformacional de las organizaciones», una visión en la que también incide Héctor Flórez, socio director de consultoría de Deloitte, para quien «las nuevas tecnologías pueden causar una disrupción masiva en los modelos de negocio tradicionales».

Y es que «incluso en los negocios regulados surgen nuevos competidores que pueden ser mucho más eficientes, dado que integran desde su origen tecnologías que se han abaratado mucho. Y en algunos sectores, estos competidores pueden llegar a controlar la relación con los clientes, dejando a los tradicionales como meras fábricas. En mayor o menor medida, todos los sectores van a ser disrumpidos: la forma de hacer negocios está cambiando y dicho cambio se va a acelerar», asegura Flórez. Coincide con su visión José Manuel Leceta, director de Red.es, para quien «siempre hay que estar pendiente de los competidores para no quedarte con el negocio en las manos».

Para Flórez, «nos enfrentamos a un amplio —e incluso confuso— abanico de tecnologías: IoT, ‘machine learning’, ‘robotics’, Blockchain, inteligencia artificial, etc. En este contexto, es necesario elegir dónde invertir y priorizar aquellas tecnologías con mayor impacto en la mejora de la eficiencia y relación con el cliente, y en las que se estima que las inversiones pueden tener un retorno más rápido. Y ‘robotics’ es una de ellas», asegura.

La apuesta de la compañía por la robótica es tal que, de hecho, «no solo la estamos ofreciendo a nuestros clientes, sino que la estamos aplicando a nuestros propios procesos internos y a los modelos de servicio de nuestros distintos negocios: la auditoría, el asesoramiento fiscal o incluso las ‘due dilligence’, que a día de hoy ya incorporan esta tecnología».

Pero todo esto va incluso más allá de las empresas. «La revolución tecnológica no solo impacta a las empresas, también tiene una enorme incidencia en la sociedad», asegura Fernando Ruiz, presidente de Deloitte. «Uno de los principales retos se sitúa en el empleo del futuro y en las nuevas capacidades profesionales requeridas: la robótica ocupará funciones que ahora son realizadas por humanos, así que los nuevos perfiles profesionales, además de saber matemáticas, ciencias o tecnologías, deberán ser especialmente fuertes en aspectos que un robot nunca llegará a realizar».

Así pues, para el presidente de la firma, «la creatividad, la intuición o la inteligencia emocional serán conceptos de enorme relevancia que deben incluirse en los programas de formación de los más jóvenes». Y para ello «debemos fomentar desde todos los niveles educativos y desde la propia empresa la formación de personas con un conocimiento tecnológico muy especializado, que trabajen y se organicen de forma diferente para tomar decisiones con rapidez y profesionalidad».

Una de las intenciones del propio centro de excelencia en ‘robotics’ de la compañía es contribuir a «crear empleo de calidad y apto para desarrollarse en este nuevo entorno. El conocimiento que confluye en este centro es la mejor forma de seguir impulsando e innovando en torno al campo de la robótica», asegura Fernando Ruiz.

Para Héctor Flórez, en definitiva, la robótica se plantea como un nicho esencial en los próximos años: «La tecnología representa una gran oportunidad pero, al mismo tiempo, no actuar rápidamente para incorporarla puede suponer demasiados riesgos. Incorporar las nuevas tecnologías no es una opción, es un imperativo para tener éxito».

Fuente: www.elconfidencial.com